Desde sus orígenes Estado Unidos de América ha sido un país que tiene en su esencia la inmigración, miles de personas documentadas y no documentadas procedentes de diferentes países y condiciones, buscan una mejor calidad de vida. Décadas atrás la lucha por permanecer y radicar legalmente en Estados Unidos se ha vuelto tema de controversia no sólo en lo político, sino también en lo social y económico; la nueva política inmigratoria tomada por el gobierno estadounidense criminaliza al migrante y lo deporta de la nación americana. El proceso de remoción y retorno como estrategia de expulsión de migrantes ocasiona la separación familiar y la renuncia al patrimonio construido por décadas; a este proceso de expulsión se suma el deseo de permanecer territorialmente cerca de la familia, por ello se toma la decisión de vivir en alguna ciudad mexicana fronteriza con Estados Unidos.
La propuesta que ofrece la Casa del Migrante en Tijuana A.C., ante el fenómeno de la deportación masiva de migrantes mexicanos de Estados Unidos, se visualiza como una alternativa positiva y de gran beneficio para favorecer el proceso de integración social, laboral y económica de los connacionales que pretenden establecerse en las ciudades fronterizas, especialmente en Tijuana. El proyecto lleva por título: El Programa de Transición de la Casa del Migrante en Tijuana A.C., el cual tiene como objetivo: lograr la integración e inserción social del migrante mexicano deportado. Dicho proyecto se fundamenta en cuatro áreas claves para su desarrollo y funcionamiento eficaz: departamento de trabajo social, departamento de psicología, departamento de asesoramiento legal y por último el departamento de vinculación laboral y documentación mexicana, siendo estos la columna principal con las que se le da seguimiento a los migrantes del programa.
La metodología de la investigación sobre la importancia del programa se desarrolla en cuatro capítulos: el primero, se contextualiza sobre el actual sistema de deportación de mexicanos de Estados Unidos y sus consecuencias; en el segundo capítulo se analizan las respuestas gubernamentales en México ante el sistema actual de deportación de Estados Unidos, dígase de los distintos programas federales de apoyo al migrante deportado, sus alcances y limitaciones; en el capítulo tercero, se presenta el Programa de Transición como iniciativa de la Casa del Migrante en Tijuana A. C., por último, y no menos importante, el capítulo cuarto en el que se analizan los resultados de dicho programa en su año de inicio (2015). En las conclusiones se hace presente el alto valor público y de inferencia social que brinda el proyecto el cual surge de un proceso de observación, atención y reflexión de los casos reales de varios de los migrantes que se atienden a diario en Casa del Migrante en Tijuana A.C.
Since its origins, the United States of America has been a country that has immigration as its core. Millions of documented and undocumented individuals originating from different countries and conditions, seek a better quality of life in a place where these conditions and possibilities can be met. Since decades ago, the struggle to stay and settle legally in the United States was not only a controversial topic in politics, but a social-economic issue as well. The new immigration policies that have been taken by the US government, which criminalize migrants that are non-citizens, brings about the expulsion of non-citizen, migrants that have lived in the US for more than ten years. The process of removal and return uses the expulsion of migrants as a strategy that causes separations in families and renunciation of one’s homeland. Constructed for decades, this expulsion process is summarized as many non-citizen, migrants having a desire to stay territorially close to their family. As a result, the decision is taken to live in a city at the border of Mexico and the United States.
The solution that the Casa del Migrante in Tijuana A.C. proposes, to the phenomenon of the massive deportations of Mexican migrants from the United States, can be visualized as a positive alternative and major benefit in favor of social and liberal integration to the nationals who pretend to establish themselves in border towns, especially in Tijuana. The title of this project is: “The social insertion of the deported migrant: the transition program of the Casa del Migrante in Tijuana A.C.” Its objective is to accomplish social integration and insertion for the Mexican deportee. This projects has its fundamentals rooted in four supporting areas: a social worker’s office, a psychology department, legal assistance, and laboral vinculation and Mexican documentation. These are the principal pillars in which the migrants are given support through this project.
The methodology of this investigation will be developed in four chapters. The first chapter will contextualize the actual deportation system of Mexican deportees from the United States and its consequences. The second chapter will analyze Mexico’s governmental responses to the actual deportation systems of the United States; in other words, the distinct federal programs that support deported migrants, their outreach and limitations. The third chapter presents the social insertion project as an initiative of the Casa del Migrante in Tijuana A.C., compromised with the migratory vulnerability profile. Last but not least, the fourth chapter will analyze the results of this program in the year that it was initiated (2015). The conclusion presents a high value and social influence provided by this program which arises a process of observation, attention and reflection of real cases from various migrants that are taken care of daily in Casa del Migrante in Tijuana A.C.